martes, 4 de agosto de 2020

SIN E-MÉRITO



Escribir también es poder decir aquello que te deja sin palabras. Y la libertad es contar incluso lo que te obligan a callar. Como silencios impuestos para no dañar el poder de los que siempre impusieron genuflexión en los vasallos. Una se pregunta de donde se le supone el valor a algunos hombres y que hicieron en sus vidas de oropeles para serle otorgados reinos y taifas. La imposición nunca es buena. Los reyes son pueblos de injusticia, sobre todo, cuando pudiendo ser y comportarse, el afán de tener sin merecer se convierte en una huida con las alforjas llenas y la cabeza baja por el peso de una corona mal llevada


Mientras, el país araña  a la esperanza.

PD. Cuando a los reyes le escriben todo lo que tienen que decir y les dicen todo lo que tienen que hacer, acaban d-escribiendo su propia historia.