Crónica del día: Tener
que poner a la "cultura" entre comillas como peyorativo de morir por amor al arte es, en el tema que
nos ocupa hoy a los gatos de esta casa, tan lamentable como escuchar que está justificado matar a golpe de fiesta y tradición.
Para irse a dormir a
pierna suelta y que no se altere el ritmo circadiano, dice el manual gático de las buenas costumbres nocturnas,
que hay que hacerlo en condiciones óptimas de conciencia tranquila; que no
medie discusión ni maullido que cause enojo, y que a los ojos no se les dilaten
las pupilas por ver dolor o tragedia antes de intentar soñar con ángeles y
sardinitas frescas.
Pero anoche, antes de
que Morfeo acunara a todo habitante felino de esta casa, mis ojos se
encontraron con los terriblemente hermosos y opacos de
“Elegido”, el Toro de La Vega elegido para la ocasión de divertimento y
barbarie humana. Herido de muerte y “cultura”, el astado dirigía su última
mirada al personal que, frente a él, aullaba regurgitando alegría por su
inminente y último lanzazo.
Malditos humanos,
maullé sin ánimo de articular sonido alguno para no despertar todavía más a la
conciencia, y tener que sorberme las lágrimas y el asco por tanta “cultura y
tradición” que mata en nombre de las costumbres.
La madrugada me
sorprendió visionando un traje, sin luces, de negro y rojo, en un albero convertido en monte y gresca humana, mientras un
luto se esparcía entre nubes que barruntaban llanto y quebranto.
Elegido… Qué ironía
del destino llamarse como el elegido para ser muerto en Tordesillas.
Llamar cultura a la barbaridad, ¡qué desfachatez!.
ResponderEliminarHa días que no entiendo a los humanos en general y otros muchos que no me entiendo a mi en particular, pero, matar por matar, eso no lo comprenderé ningún día de mi vida.
Mil besos.
Encarni